Resulta que para muchos de nosotros, moverse libremente en el agua es como volar, bailar, una especie de meditación. Da una sensación de independencia y libertad. Para algunos, el buceo te permite creer en ti mismo, superar limitaciones y miedos. También es una excelente manera de explorar el mundo y hacer nuevos contactos, a veces amistades para toda la vida, porque nada conecta a las personas como una pasión común.